BAILARINAS
crear seres femeninos, delicados y etéreos, usar el gesto de sus cuerpos, sus líneas y movimientos como medios de expresión.
Estas nacen gracias a quiebres y transmutaciones matéricas: de la arcilla a la fundición del bronce o bien, de los grandes bloques de maderas o metales que se forjan para dar origen a diversas expresiones, a gestos únicos e irrepetibles, a momentos de la vida o simplemente a situaciones que muchas veces derivan en el baile. Un arduo oficio que logra traspasar la dureza y rigidez de los materiales a un gesto delicado y femenino.
Así es como da inicio la Serie "Bailarinas" de bronce a la cera perdida.
Ellas de diferentes actitudes, bailándole a la vida, hacia el cielo. Cuerpos libres con fuertes movimientos que hablan por sí solos. Representan a la mujer, que avanza no se detiene, y es capaz de mantener su esencia, su feminidad , utilizando el cuerpo y la verticalidad, sus líneas, su expresión y sus movimientos para así poder lograr ese cálido silencio que conecta lo terrenal y lo etéreo tan sutil y a la vez tan fuerte de cada mujer.
La fragilidad mal entendida de la mujer, la bailarina debe parecerlo, hay una gran contradicción, la bailarina es aquella mujer fuerte que con trabajo y esfuerzo logra representar esa fragilidad, delicadeza y femineidad de cada una de las obras